El tubo de acero dulce es un tubo de acero al carbono fabricado con acero al carbono con bajo contenido de carbono como materia prima principal, procesado mediante laminación, soldadura o sin costura. Se utiliza ampliamente en estructuras de construcción, equipos industriales, transporte por tuberías, fabricación de automóviles y otros sectores. Para prolongar la vida útil de los tubos de acero dulce en entornos hostiles, se suele utilizar la galvanización para formar una capa de zinc en la superficie del tubo de acero, mejorando así su resistencia a la corrosión. Entonces, considerando todos los factores, ¿cuál es mejor, el tubo de acero dulce galvanizado o el no galvanizado?
La elección de tubos de acero dulce galvanizados y no galvanizados debe evaluarse exhaustivamente según los escenarios de uso y las necesidades específicas. A continuación, se presenta una comparación detallada del proceso de fabricación, la durabilidad, las diferencias de uso y las diferencias de precio:
Diferencias en el proceso de fabricación
1. Tubo de acero dulce galvanizado
Se forma una densa capa de zinc en la superficie del tubo de acero mediante el proceso de galvanizado por inmersión en caliente (inmersión del tubo de acero en zinc líquido fundido) o electrogalvanización (deposición electrolítica de la capa de zinc). El proceso de galvanizado aumenta la resistencia a la oxidación y la corrosión, pero es complejo y consume mucha energía.
2. Tubo de acero dulce no galvanizado
Se lamina o suelda directamente a partir de acero con bajo contenido de carbono, sin necesidad de recubrimiento, con un proceso de fabricación sencillo y un bajo coste.
Diferencias en durabilidad
1. Tubo de acero dulce galvanizado
La capa de zinc proporciona doble protección (barrera física + protección anódica de sacrificio), lo que prolonga significativamente su vida útil (hasta 20-50 años). Sin embargo, la capa de zinc puede desprenderse debido a daños mecánicos o a la exposición prolongada a entornos ácidos/alcalinos fuertes, lo que provoca corrosión local.
2. Tubo de acero dulce no galvanizado
No existe riesgo de desprendimiento del recubrimiento y la superficie inicial es más lisa. Sin embargo, la tubería de acero es propensa a oxidarse cuando se expone directamente a la humedad, la niebla salina o entornos corrosivos, y tiene una vida útil corta (generalmente de 5 a 15 años).
Diferencias en los escenarios de uso
1. Tubo de acero dulce galvanizado
Se utiliza ampliamente en aplicaciones donde se requiere protección anticorrosiva, como redes de tuberías exteriores (suministro de agua, sistemas de drenaje), riego agrícola, sistemas de climatización (HVAC) y otros campos propensos a la humedad o en ambientes corrosivos. En entornos hostiles, los tubos de acero galvanizado ofrecen una mejor resistencia a los factores externos y reducen los costos de mantenimiento.
2. Tubos de acero dulce no galvanizados
Ideales para ambientes interiores y secos o áreas con bajos requisitos anticorrosivos, como estructuras de edificios, soportes internos, decoración, etc. Cuando se utilizan en ambientes húmedos o corrosivos, se requieren medidas de protección adicionales o un mantenimiento más frecuente.
Diferencias de precio
1. Tubos de acero dulce galvanizados
Debido al proceso de galvanizado (ya sea por inmersión en caliente o galvanoplastia), el costo de producción es mayor, lo que resulta en un precio de mercado generalmente más alto que el de los tubos de acero no galvanizados. Sin embargo, el costo de mantenimiento a largo plazo es bajo, lo que reduce la frecuencia de reemplazo y el tratamiento anticorrosivo.
2. Tubos de acero dulce no galvanizados
El proceso de fabricación es sencillo y no requiere tratamiento anticorrosivo adicional, por lo que su precio es bajo, ideal para proyectos con presupuestos ajustados. El mantenimiento a largo plazo es elevado y las piezas corroídas deben pintarse o sustituirse periódicamente.
Recomendaciones completas
Los tubos de acero dulce galvanizados son adecuados para entornos húmedos y corrosivos o infraestructuras a largo plazo (como tuberías de agua y estructuras exteriores), priorizando la durabilidad y los bajos costes de mantenimiento. Los tubos de acero dulce no galvanizados son más adecuados para entornos secos, proyectos a corto plazo o aquellos que requieren un procesamiento secundario (como pintura o soldadura) y presupuestos limitados. Cabe destacar que las tuberías galvanizadas pueden liberar humos tóxicos de zinc al soldarse, por lo que se requiere protección para la ventilación. Para las tuberías de agua potable, se recomienda elegir tuberías galvanizadas que cumplan con las normas de calidad alimentaria (como la galvanización por inmersión en caliente) o utilizar tuberías de acero inoxidable. Las tuberías no galvanizadas pueden prolongar su vida útil en ambientes húmedos mediante la aplicación de pintura antioxidante.